Estas tierras boscosas de cumbres medianas pero heladas, escasamente visitadas por las nieves, en su franja media una gran llanura que en tiempos muy pretéritos eran pantanos, hasta tocar las ribereñas montañas rocosas de la cordillera de los Andes, donde ahora si se han vuelto a aprovechar los vientos, los majestuosos y carroñeros cóndores.
En esta búsqueda de esta área Mallequina que se extiende ya por 24 años, también han caído en mis redes investigativas otros hechos extraños, como son: el chupacabras, animales anómalos y seres absolutamente distintos a los humanos, salvo por su forma humanoide.
Y como a mis casi 70 años ya me quedan muy pocos activos por delante, calculo que no mas que un lustro, me apresuro a darle punto a este breve resumen, que espero no halla sido apreciado como extenso.
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